Exigen presentación con vida de defensor de la tierra en Guerrero
Uno de los principales defensores de la tierra en el estado de Guerrero fue desaparecido de manera violenta, el pasado 5 de agosto. Vicente Suastegui Muñoz es uno de los luchadores que participa en el Consejo de Ejidos y Comunidades Opositores a la Presa de la Parota (Cecop), un mega proyecto al que resisten las comunidades desde 2003.
Marco Antonio Suastegui Muñoz, vocero del Cecop y hermano de Vicente, habló con Once Noticias sobre el caso.
En el movimiento hemos sido asesinados, perseguidos, encarcelados y ahora nos tocó sufrir la desaparición de mi hermano Vicente Suastegui Muñoz, quien también forma parte de esta lucha incansable contra ese proyecto depredador que es la presa de la Parota”, dijo Marco Antonio.
En el año 2014 llevaron preso a Marco Antonio, al Penal Federal de Nayarit. El movimiento sufrió un fuerte golpe, pero Vicente tomó las riendas con la experiencia que él traía y logró que después de un año preso trasladaran a Guerrero a su hermano, quien salió ocho meses después.
“Vicente siguió en el activismo, pero él ya había sido identificado por el gobierno estatal y federal junto con el grupo de narcoempresarios que están instalados en la zona de Cacahuatepec, para ser exactos en el río Papagayo”, señaló su hermano.
El 7 de enero de 2018 llegó un ataque con policías, militares y marinos en la comunidad de la Concepción, en la zona rural de Acapulco, donde fueron torturados, amenazados y asesinados algunos de los activistas.
“Nos juntaron a todos después de perseguirnos con helicópteros y armas, nos detuvieron a cerca de 40 hombres, 25 estuvimos encarcelados y tres fueron ejecutados a plena luz del día cuando estaban hincados junto a todos nosotros, se puso una denuncia por esa ejecución. El que iba al frente era el comandante Esteban Maldonado Palacio, él nos dijo que tenía la orden del gobernador de llevarnos vivos o muertos”, explicó el vocero del Cecop.
Metieron a 25 de ellos a prisión, pero salieron absueltos del delito de homicidio por falta de pruebas. Los presos retomaron su libertad en el año 2019 para iniciar con la lucha, pero Vicente siguió siendo objeto de persecución.
Ya sabían dónde trabajaba, dónde vivía. Él salió de su comunidad en Cacahuatepec porque lo amenazaron grupos paramilitares. Salió del Acapulco rural y se va al Puerto de Acapulco. En la ciudad logró encontrar trabajo en un taxi colectivo, y el 12 de julio de este año, nuevamente agreden a Vicente, fue la Marina y el Ejército Mexicano que llegaron a su domicilio, le dispararon a su auto y pusieron los cañones calientes en el cuello. Dentro de una casita humilde en la colonia Ciudad Renacimiento no encontraron nada que lo relacionara con los asuntos ilícitos que le inculpaban. Tomamos datos de las patrullas militares y de marinos que entraron y en 72 horas quedó libre de cualquier cargo pues no había una sola prueba de los delitos que lo acusaban”, comentó el hermano de la víctima.
Vicente siguió trabajando y el 5 de agosto, a las 11 de la noche, regresaba de trabajar en su taxi colectivo de color amarillo que recorría la ruta “Ciudad Renacimiento – Centro de Acapulco”. Hombres armados le cerraron el paso sobre el Circuito Interior, a la altura de la Secundaria Federal número 9. Lo bajaron con violencia y disparos, después lo subieron en una camioneta y fue así como la familia y amigos iniciaron la búsqueda, pero no dieron con Vicente en hospitales, ni fiscalías.
Sus hermanas Guillermina y Fortina pusieron la denuncia de desaparición el viernes 6 de agosto, pero hasta la fecha no han tenido pistas sobre el paradero de Vicente.
“La Fiscalía no ha entregado nada, sabemos que hay cámaras de seguridad donde pasó todo, nosotros estamos pidiendo que revisen y resguarden esas grabaciones. Pedimos la geolocalización y la sabana de llamadas de su celular para dar con el paradero de mi hermano. Exigimos al presidente del estado y a la fiscalía que lo entreguen con vida porque ellos lo estaban buscando y amenazando. Vicente no tiene enemigos personales. Por eso nosotros decimos que la principal línea de investigación tiene que ser contra el Estado, porque ellos lo persiguieron y criminalizaron”, denunció Marco Antonio Suastegui.
Otra de las principales líneas de investigación que se tienen que seguir son esos frentes económicos que han implantado “medidas de terror” dentro de las comunidades que están junto al Rio Papagayo. Entre las instituciones que han visitado está la Comisión Nacional de Búsqueda, quien se comprometido a iniciar los protocolos para la búsqueda en vida de Vicente Suastegui Muñoz.
“Como luchador social por el territorio y recursos naturales, Vicente pisó intereses y economías de empresarios que están sobrexplotando el suelo del Río Papagayo. Por los que también es una de las demandas de los pobladores de Concejo de ejidos y comunidades opositoras a la presa la Parota, que se investigue a los narcompresarios gavilleros”.
Marco Antonio también es parte del Mecanismo de Protección a Periodistas y Defensores de Derechos Humanos, cuenta con medidas cautelares que consideró insuficientes, es por eso que “hoy sufrimos este cobarde ataque”.
El proceso de persecución y criminalización culminó con la desaparición de mi hermano, por eso pedimos la intervención del Gobierno federal y de las Naciones Unidas para que se investigue al Gobierno y a la fiscalía del estado, porque insisto, son ellos quienes perseguían y torturaban a mi hermano. Ahorita se llevaron a Vicente, pero al rato van a querer hacer lo propio con mi persona o con mi familia”, concluyó Marco Antonio Suastegui, vocero del Cecop.